The Giver (El Dador), Lois Lowry

Título: The Giver (El Dador de Recuerdos 1)
Título original: The Giver
Serie: El Dador de Recuerdos #1 de 4
Autor: Lois Lowry
Editorial: Everest
Fecha de publicación: 2006 en España (publicado en 1993)
Número de páginas: 240
ISBN:  978-84-241-3584-3
Sinopsis:

Un mundo futuro en el que se ha conseguido la igualdad total. En la Ceremonia anual de cada mes de diciembre se celebra el paso de todos los niños a un nivel superior. Los Onces pasan a Doces y reciben sus asignaciones vitalicias: después de dar a cada uno las «gracias por su infancia», el Comité de Ancianos asigna, de acuerdo con las capacidades y gustos, la misión más apropiada para cada chico. Jonás recibe, sin embargo, una misión no común: ser el próximo Receptor de Memoria de la Comunidad. Con este fin, inicia un aprendizaje doloroso y distinto, en el que le indican que si la libertad asusta, «es verdad que hay que proteger a la gente de la posibilidad de escoger mal».

Primeras páginas

Opinión:

En primer lugar, quiero aclarar que hace mucho que leí este libro, así que no voy a poder extenderme con los detalles.

Cuando cogí este libro en la biblioteca había leído ya muchos libros "juveniles" (vamos, Young Adult) y estaba acostumbrada a grandes dosis de acción, romance y entretenimiento. De vez en cuando algo que te hacía reflexionar, pero tampoco muy duros.

The Giver no se parece en nada a ese tipo de lecturas. De entrada, porque es un libro enfocado a un público más joven, de unos 10-12 años. Y segundo porque la carga, digamos, ideológica es mucho mayor. Lowry lo camufla, no lo dice abiertamente, pero se abre una clara línea de reflexión acerca de temas tan impactantes como puedan ser la eutanasia, la eugenesia, el suicidio o la importancia de conocer nuestro pasado.

Centrándonos en la historia en sí, se trata de una trama sencilla, que nos presenta una sociedad utópica, perfecta, que Jonás poco a poco irá desmantelando, y averiguando que es en realidad distópica.

Los personajes son sencillos, así como la prosa. Sencilla pero directa al grano. Lowry no se enreda en descripciones innecesarias, por lo que, aunque no tiene mucha acción (excepto al final del libro), la lectura se hace muy ligera y llevadera. Y si os metéis realmente en la historia (como me pasó a mí) no podréis soltar el libro.

Lo mejor de esta novela no es la historia que cuenta en sí misma, sino lo que pretende dar a entender con esa historia. Todos los habitantes de la comunidad de Jonás son felices viviendo en la ignorancia. Ignorancia porque no conocen los sobresaltos, la guerra, la miseria; pero tampoco el amor o las emociones. El portador de conocimiento, el Receptor de los recuerdos (el papel que desempeñará Jonás), es el único en la comunidad que se ve obligado a vivir con todo el sufrimiento que SABER conlleva. Pero, a la vez, es consciente de lo superficial e insensible que es la vida de las personas de su alrededor. ¿Qué es mejor, ser ignorantes y vivir en paz y en armonía, sin hambre ni odio? ¿O conocer, y querer aspirar a un mundo con emociones, que no sea perfecto?

Esto y mucho más es lo que ofrece la lectura de The Giver. Lo cierto es, que aunque me encanta mirar en el trasfondo de la historia, y lo recomendaría encarecidamente como lectura obligatoria en el instituto, la historia en sí no termina de convencerme. Me gusta, pero me deja deseando más. Más profundidad de los personajes, más desarrollo, más. Tal vez es que estoy acostumbrada a leer otro tipo de historias, y el tono infantil de ésta me deja incómoda. Creo que si la hubiera enfocado a un público mayor, podría haber dado mucho más de sí. Pero también comprendo la importancia de llevar estos temas a los niños que empiezan a dejar de serlo. Así que me conformo. Supongo que la habría apreciado mucho más si la hubiera leído con once años.

A pesar de ello, os recomiendo mucho esta novela. 

NOTA: 4/5

Montse